Resumen |
Mamá cerdito por fin puede sentarse a trabajar tranquila ahora que los niños juegan juiciosos en el jardín. Pero las cosas parecen no estar saliendo como espera y todo tipo de travesuras la alejan de su escritorio... Cuando papá cerdito llegó a casa, prefirió no preguntar nada. Ayudó a preparar la cena, acostó a los niños y le dio una taza de té a mamá cerdito, que todavía tenía que trabajar dos horas... |